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Startup en Francia: Cómo elegir la estructura empresarial perfecta

Startup en Francia: Cómo elegir la estructura empresarial perfecta

¿Cómo iniciar una startup en Francia?

Si aspiras a la libertad financiera, probablemente hayas tenido ideas brillantes para una startup internacional. Francia puede ser el lugar perfecto para hacer realidad esas ideas. Este país ofrece excelentes oportunidades para los emprendedores, como el acceso a infraestructura avanzada, profesionales cualificados y programas de apoyo gubernamental.

Por un lado, Francia es conocida por su economía competitiva; por otro, cuenta con un sistema fiscal complejo. Para garantizar que tu startup no solo sobreviva, sino que prospere, es esencial minimizar la carga fiscal, gestionar las finanzas de manera eficiente y desarrollar una sólida estrategia de crecimiento internacional desde el principio.

Una estructura empresarial bien organizada puede ayudarte a evitar pérdidas financieras, proporcionar flexibilidad en la gestión y simplificar la escalabilidad. Tu startup no solo debe ser un proyecto exitoso, sino también una herramienta en tu camino hacia la independencia financiera. Entonces, ¿cómo empezar este camino?

Auto-entrepreneur: El inicio perfecto

Una de las formas más populares para iniciar un negocio en Francia es el estatus de auto-entrepreneur (emprendedor autónomo). Este estatus es ideal para quienes están en la etapa de desarrollo del producto y realizan sus primeras ventas.

Ventajas del modelo Auto-entrepreneur:
  • Contabilidad simplificada: no es necesario tener sistemas contables complejos. Basta con llevar un registro sencillo de ingresos y gastos.
  • Exención de IVA: mientras se respeten los límites de ingresos, los emprendedores están exentos de IVA, lo que les permite emitir facturas sin este impuesto.
  • Impuestos basados en los ingresos: los impuestos y las cotizaciones sociales se calculan como un porcentaje de los ingresos realmente obtenidos.
Limitaciones del modelo Auto-entrepreneur:
  • Límites de ingresos: en 2024, el tope anual de facturación es de 77.700 € para servicios y 188.700 € para comercio de bienes.
  • No se puede recuperar el IVA: la exención de IVA significa que no se puede recuperar el IVA de los bienes y servicios adquiridos.
  • Cotizaciones sociales: las tasas pueden cambiar. A partir del 1 de julio de 2024, la tasa para servicios será del 23,1%, aumentando al 26,1% en 2026.

Este modelo es perfecto para probar una idea de negocio mientras se minimizan las cargas burocráticas. Sin embargo, una vez que los ingresos superen los límites establecidos, será el momento de considerar una nueva forma jurídica.

Elegir entre SAS y SARL

Para el crecimiento empresarial en Francia, dos formas jurídicas son populares: SAS (société par actions simplifié — sociedad por acciones simplificada) y SARL (société à responsabilité limitée — sociedad de responsabilidad limitada). Si la empresa se crea con un único fundador, estas formas se transforman respectivamente en SASU (société par actions simplifié unipersonnelle) y EURL (entreprise unipersonnelle à responsabilité limitée).

Ventajas de SAS y SARL:
  • No se requiere capital mínimo: para el registro solo se necesita 1 euro simbólico.
  • Responsabilidad limitada: la responsabilidad de los participantes está limitada a sus aportaciones.
Especificidades fiscales:

Desde el 1 de enero de 2018, en Francia se aplica un impuesto único (Flat Tax) sobre los ingresos de capital, incluidos los dividendos. La tasa del impuesto es del 30%, que incluye el impuesto sobre la renta (12,8%) y las cotizaciones sociales (17,2%). Sin embargo, existen diferencias entre SAS y SARL:

  • En una SAS, los dividendos solo están sujetos al impuesto único.
  • En una SARL, para los gestores mayoritarios (que poseen más del 50% del capital), los dividendos que superen el 10% del capital, las reservas y las cuentas corrientes están sujetos además a cotizaciones sociales de aproximadamente el 45%.

¿Cuál elegir?

Si planeas atraer inversiones, añadir cofundadores u ofrecer opciones a los empleados, la SAS es la elección óptima. Si tu empresa está orientada hacia una gestión familiar o de pequeña escala, la SARL podría ser más adecuada.

Un análisis financiero detallado de las empresas SARL y SAS para evaluar su eficiencia según diferentes métodos de distribución de beneficios puede ser clave para tomar una decisión. Para obtener asesoramiento personalizado sobre la elección de la estructura legal adecuada y el desarrollo de una estrategia de crecimiento, puede consultar de forma gratuita a Julien Legaro.